Silla de ruedas eléctrica plegable o fija: ¿cuál es mejor?

Silla de ruedas eléctrica plegable o fija: ¿cuál es mejor?

Comodidad y diseño:

Uno de los puntos clave es la comodidad. Las sillas de ruedas eléctricas fijas suelen ser más robustas, con asientos más acolchados y estructuras más resistentes. Esto significa que, si pasas muchas horas sentado, podrías sentirte más cómodo. Las sillas plegables, en cambio, priorizan la movilidad y el diseño compacto, por lo que a veces sacrifican un poco el confort.

Aún así, hay modelos de sillas de ruedas plegables que han mejorado mucho en este aspecto. La clave está en revisar el material del asiento, el respaldo y si permite ajustes ergonómicos.

Peso y facilidad de transporte

Las sillas de ruedas fijas suelen ser más pesadas, ya que su estructura está diseñada para ser más resistente. Esto está mu bien para la estabilidad y la durabilidad, pero puede ser un problema si necesitas transportarla.

Las sillas de ruedas plegables están diseñadas pensando en la portabilidad. Suelen pesar menos y pueden plegarse fácilmente. Esto es una gran ventaja si necesitas meterla en el maletero del coche. No todas son igual de ligeras, así que aquí es importante fijarse en los kilos exactos y en el mecanismo de plegado.

Si viajas con frecuencia, ya sea en coche o en avión, una silla de ruedas plegable puede ser la mejor opción. Las aerolíneas tienen restricciones de peso y dimensiones, por lo que una silla fija puede complicar bastante las cosas (pregunta a tu técnico ortopédico por los certificados de las baterías).

Autonomía:

Las sillas de ruedas fijas tienden a tener baterías más grandes y, por lo tanto, ofrecen una mayor autonomía. Si usas la silla durante todo el día y no quieres estar preocupado por recargar, esto puede ser un punto a favor.

Las sillas de ruedas plegables, por su diseño compacto, suelen tener baterías más pequeñas. Esto no significa que no puedan rendir bien, pero si piensas recorrer distancias largas, revisa bien la autonomía antes de decidirte.

Facilidad de plegado:

La teoría es que una silla de ruedas eléctrica plegable se pliega y despliega rápido y sin esfuerzo. La realidad es que algunos modelos hacen que este proceso sea un suplicio. Si estás considerando una silla plegable, prueba el mecanismo antes de comprarla. Hay modelos que con un solo botón se pliegan automáticamente, mientras que otros requieren varios pasos (aunque sea más seguro por si se bloquea el cierre automático).

Si tienes problemas de movilidad en las manos, asegúrate de que el plegado sea lo suficientemente sencillo para ti o para la persona que te ayude.

Espacio en el maletero del coche

El tamaño de la silla cuando está plegada es un factor crucial. No todas las sillas de ruedas plegables caben bien en cualquier maletero. Algunas, aunque se pliegan, siguen ocupando bastante espacio.

Antes de comprar, mide el maletero de tu coche y compara con las dimensiones de la silla plegada. Si tienes un coche pequeño, podrías necesitar una silla ultra compacta. Y si la silla es fija, olvídalo: necesitarás una rampa o un elevador para cargarla.

Viajar en avión con una silla de ruedas eléctrica

Las aerolíneas tienen regulaciones estrictas sobre las baterías de litio. Las sillas plegables suelen tener baterías más pequeñas y extraíbles, lo que facilita su aprobación en vuelos. En cambio, las sillas de ruedas eléctricas fijas pueden tener baterías más grandes y, en algunos casos, podrías tener que desmontarlas o gestionar permisos especiales.

Consulta siempre con la aerolínea antes de viajar. Cada compañía tiene sus propias normas, y la última cosa que quieres es llegar al aeropuerto y que no te dejen embarcar por culpa de la silla.

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