Fractura del boxeador: ¿Qué es y cómo se trata?

La fractura del boxeador es una de las lesiones más comunes en la mano, particularmente entre personas que participan en deportes de contacto, como el boxeo o las artes marciales, pero también puede ocurrir como resultado de caídas o golpes accidentales. Esta lesión afecta específicamente el quinto metacarpiano , que es el hueso situado en la base del dedo meñique. Su nombre deriva del hecho de que suele ocurrir cuando se golpea una superficie dura con el puño cerrado, como al lanzar un mal golpe durante una pelea.

En este artículo detallaremos qué es la fractura del boxeador, cómo ocurre, cuáles son sus síntomas, el tratamiento que incluye las férulas ortopédicas y otras opciones, además de los consejos de prevención para evitar esta lesión.

¿Qué es una fractura del boxeador?

La fractura del boxeador afecta principalmente al cuello del quinto metacarpiano , que es el hueso ubicado en la base del dedo meñique. Esta parte de la mano es particularmente vulnerable a fracturarse cuando se golpea con la parte lateral del puño (4º y 5º dedos) , en lugar de los nudillos más grandes de los dedos índice y medio, que son más resistentes a los impactos.

Aunque el nombre sugiere que solo los boxeadores sufren esta lesión, en realidad cualquier persona puede verse afectada si golpea una superficie dura con el puño o sufre un golpe directo en la mano.

Causas

La principal causa de la fractura del boxeador es un golpe fuerte con el puño cerrado, lo que genera una gran presión en los huesos de la mano. Las situaciones más comunes que pueden causar esta lesión incluyen:

• Deportes de contacto , como boxeo, artes marciales o peleas callejeras.
• Golpes accidentales contra una superficie dura, como una pared o el suelo.
• Caídas sobre el puño cerrado, lo que ejerce presión sobre el quinto metacarpiano.

Síntomas de la fractura del boxeador

Los síntomas más comunes de la fractura del boxeador incluyen:

1. Dolor inmediato en el área del golpe, que puede intensificarse al mover la mano o los dedos.
2. Inflamación alrededor del nudillo y la mano.
3. Moretones en el área afectada.
4. Dificultad para mover los dedos y cerrar el puño.
5. Deformidad visible , como un nudillo hundido o desplazado.
6. Sensibilidad al tacto en la zona del meñique.

Diagnóstico

El diagnóstico de la fractura del boxeador se realiza a través de una exploración física inicial, en la que el médico o el técnico ortopédico examina la deformidad y la capacidad de movimiento de la mano. Posteriormente, se solicitará una radiografía para confirmar la ubicación exacta de la fractura y determinar si hay desplazamiento o si es una fractura limpia.

Tratamiento de la fractura del boxeador

El tratamiento depende de la severidad de la fractura. Las opciones de tratamiento incluyen desde métodos no invasivos, como férulas, hasta cirugía en los casos más graves.

1. Férulas para la fractura del boxeador

En la mayoría de los casos, la fractura del boxeador se trata de manera conservadora mediante la colocación de una férula que inmoviliza la mano mientras el hueso sana. Existen diferentes tipos de férulas que pueden ser colocadas por un técnico ortopédico especializado, y su elección depende de la gravedad de la fractura y las necesidades del paciente:

• Férula en “U” o férula volar : Es una de las férulas más comunes para este tipo de fractura. Se coloca alrededor de la palma y la parte posterior de la mano, inmovilizando los dedos y evitando que el hueso se desplace mientras está sano. Esta férula mantiene la mano en una posición funcional sin restringir completamente la movilidad de los dedos no afectados.
• Férula tipo guante : En algunos casos, cuando la fractura no es grave, se puede usar una férula más ligera que se ajusta como un guante alrededor de la mano. Esta férula permite una mayor movilidad en los dedos no afectados, pero aún brinda el soporte necesario para el metacarpiano fracturado.
• Férula Exos : Una alternativa innovadora es la férula Exos , que está hecha de un material termoplástico moldeable que permite una mayor personalización. Estas férulas son resistentes al agua, lo que permite al paciente mojarse las manos sin preocuparse por el daño a la férula. Además, ofrecen un ajuste más cómodo y adaptable, lo que las hace ideales para fracturas más complicadas.
• Yeso tradicional : En fracturas con desplazamiento significativo, puede ser necesario el uso de un yeso completo para inmovilizar totalmente la mano y el antebrazo. El yeso se mantiene durante aproximadamente 4 a 6 semanas, dependiendo de la evolución de la fractura.

2. Reducción cerrada

En los casos en que los huesos no están alineados correctamente, el médico puede realizar una reducción cerrada , que implica manipular los huesos a través de la piel para colocarlos en su posición correcta. Después de esta maniobra, se inmoviliza la mano con una férula o yeso.

3. Cirugía

En situaciones más graves, cuando la fractura está desplazada de forma significativa o el hueso no puede alinearse correctamente con métodos no invasivos, se puede requerir una cirugía . Durante el procedimiento, el cirujano puede utilizar placas, tornillos o clavos para estabilizar el hueso fracturado y asegurarse de que esté sano correctamente.

Proceso de recuperación

La recuperación de una fractura del boxeador varía según la gravedad de la lesión y el tratamiento empleado. Generalmente, la mano necesita entre 4 y 6 semanas para sanar completamente. Durante este período, es esencial seguir las recomendaciones del médico o del técnico ortopédico y evitar el uso excesivo de la mano afectada.

1. Fisioterapia

Una vez que la fractura ha sanado, es común que el paciente experimente rigidez o pérdida de fuerza en la mano. La fisioterapia desempeña un papel fundamental en la rehabilitación, ayudando a restaurar el rango de movimiento, la fuerza y ​​la función completa de la mano. Un fisioterapeuta guiará al paciente a través de una serie de ejercicios que se enfocan en mejorar la flexibilidad y la coordinación.

2. Consejos para la rehabilitación

• Ejercicios de estiramiento : Estos ejercicios se centran en mejorar la flexibilidad de los músculos y tendones alrededor de la mano.
• Ejercicios de fortalecimiento : Incluyen movimientos como apretar una pelota de goma o utilizar bandas de resistencia para fortalecer la mano y los dedos.
• Movilidad de los dedos : Para evitar que los dedos se vuelvan rígidos, es importante trabajar en la movilidad del meñique y los otros dedos.

¿Cómo evitar la fractura del boxeador?

La prevención es clave, especialmente para aquellos que practican deportes de contacto o realizan actividades físicas intensas. Aquí te ofrecemos algunos consejos para evitar esta lesión:

• Usa el equipo adecuado : Si practicas deportes como el boxeo o las artes marciales, utiliza guantes y vendajes que protejan tus manos.
• Mejora tu técnica : Golpear con la parte lateral del puño aumenta el riesgo de fractura. Asegúrate de aprender la técnica correcta para golpear con los nudillos más fuertes (índice y medio).
• Evita golpes innecesarios : Trata de evitar golpear superficies duras o involucrarte en peleas que puedan causar daño a tus manos.

Férulas ortopédicas para la fractura del boxeador

El uso de férulas es fundamental en el tratamiento de las fracturas del boxeador, ya que permiten inmovilizar el hueso y mantenerlo en la posición correcta durante el proceso de curación. El papel del técnico ortopédico es crucial, ya que seleccionará y ajustará la férula más adecuada según la gravedad de la fractura y la comodidad del paciente.

Las férulas juegan un papel importante no solo en la curación, sino también en la prevención de complicaciones como el mal alineamiento de los huesos y la pérdida de funcionalidad en la mano.

La fractura del boxeador es una lesión frecuente que, aunque dolorosa, se puede tratar de manera efectiva con el uso de férulas y un seguimiento adecuado. El papel del técnico ortopédico es esencial en la recuperación, asegurando que la férula sea adecuada para la lesión y que el paciente reciba el mejor cuidado posible. Con el tratamiento adecuado y la rehabilitación posterior, la mayoría de las personas pueden recuperar la funcionalidad completa de su mano en pocas semanas.

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